171293.fb2 Afines en la Muerte - читать онлайн бесплатно полную версию книги . Страница 20

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CAPITULO DIECIOCHO

CUANDO EVE ENCONTRO A ROARKE EN SU OFICINA de nuevo, ella frunció el ceño. -¿Por qué sigues aquí?-

– Ellos no me necesitan en EDD en este momento. Puedo lidiar con algunos de mis propios trabajos con la misma facilidad aquí o en cualquier lugar, con la ventaja de estar con mi esposa. -

– Voy a volver al campo. Tengo que ir por la morgue, a continuación, localizar a la estudiante que vendió al sospechoso su equipo-.

– No tengo nada más interesante que hacer.-

Ella lo consideró. Podría dejar que Peabody escribiera y presentara los informes, fastidiara al laboratorio y ejecutara las probabilidades de quien podría ser el próximo objetivo.

– Muy bien. Tú estás conmigo-.

– Mi lugar favorito-.

Habiendo dejado a Peabody su asignación, Eve fue a la morgue en primer lugar.

– Tú no necesitas venir. No espero ninguna sorpresa aquí, ni revelaciones. Es sólo procedimiento. -

– De todas formas.-, Continuó, mientras bajaba por el túnel blanco con ella. -Recuerdo cuando trajimos a Nixie aquí-, dijo, hablando de la niña cuya familia había sido sacrificada en un allanamiento de morada. -Brutal. Pero bueno, supongo que siempre lo es. Le está yendo bien con Elizabeth y Richard, y el joven Kevin. Están haciendo una familia. Creo que ella puede hacer eso porque le diste la solución. -

– Ella es dura. Va a hacerlo bien. -Se detuvo a las puertas de la oficina de Morris. -¿El responsable de lo que hay allí? Él no tuvo que arrastrarse a través de la sangre de su madre como Nixie lo hizo, no tuvo a toda su familia asesinada en sus propias camas. Él no tiene la mitad de la fuerza de Nixie. Es más débil, y yo no he podido darle más ayuda. -

Allí, pensó Roarke, allí estaba ella. Podía sentir culpa y dolor, -tal vez ella lo necesitaba-, pero podía y siempre volvería a su propósito.

Morris llevaba un traje negro, con una camisa de color rojo oscuro. La música sonaba a través del silencio en el aire mientras cerraba la Y -del corte en Karlene – con trazos seguros.

– ¿Has terminado con ella?-

– Empecé en ella inmediatamente. Hola, Roarke. -

– Morris. ¿Cómo estás? -

– Mejor de lo que estaba. Yo no esperaba volver a ver a alguno de los dos hasta la boda, y en circunstancias mucho más felices. Empujé la pantalla de toxicidad -, dijo a Eva. -Y encontré la misma combinación, aunque lo habría perdido si no lo hubiera buscado específicamente. Había sido drogada aproximadamente seis horas y media antes de la muerte, y en una cantidad menor que la que nos llegó en primer lugar. -

– Se dio cuenta de que no necesitaba que estuviera mucho tiempo desmayada-, concluyó Eve. -Y él no tenía mucho tiempo para trabajar en ella. O no quería tomar todo el tiempo. -

– Aparte de eso, y el uso de la cuerda elástica en lugar de las esposas de la policía, su método sigue siendo el mismo. Atada, los tobillos y las muñecas. Quitadas las sogas de los tobillos y vueltos a colocar. Múltiples violaciones, vaginal y anal, una paliza casi casual teniendo en cuenta la violencia de las violaciones. Esporádicos episodios de asfixia y ahogo. Causa de la muerte, estrangulación manual. Ella luchó. Como se desprende de las abrasiones, laceraciones, contusiones en las muñecas y los tobillos. -

– Él realiza variaciones pequeñas para adaptarse a las circunstancias, pero se queda con el método global.-

– Hay una variación de la otra-, dijo Morris. -Ella estaba embarazada.-

– Mierda-. Sintió el golpe a través de ella. -Maldita sea-.

– De una semana a lo sumo. Ella no pudo haberlo sabido. -

Eva empujó su pelo. Ella no se molestó a maldecir de nuevo. -Su gente va a entrar sus padres, su COHAB. Ellos se iban a casar el sábado. -

Morris lanzó un largo suspiro. -El destino es un hijo de puta cruel-.

– El destino, una mierda, las personas son hijos de puta crueles. No hay necesidad de decirle a la gente sobre el embarazo, a menos que pregunten. No todavía en todo caso. -

– No, no es necesario.- Dio un paso atrás. -Primero la virgen, ahora la novia.-

– ¿Qué?- Eve levantó la cabeza, sus ojos se afilaron. -Espera. ¿Qué viene después? -

– ¿Después de-?-

– La Virgen, la novia, ¿qué será lo próximo? Si se trata de una especie de progresión. Lógica y organizada. ¿Qué hay después de la novia? -

– Recién Casados-, sugirió Morris.

– Esposa. Para algunos… -Roarke miró con lástima Karlene. -El embarazo, la maternidad. Un cínico podría decir que el divorcio se acomoda allí en algún momento. -

– Podría ser una manera de seleccionar el orden, incluso la víctima específica. Conduce. Quiero trabajar. Gracias, Morris. -

Ella había sacado su PPC, incluso mientras caminaba de regreso por el túnel.

– Sería monumental suerte desde su punto de vista-, dijo Roarke, -que él fuera capaz de encontrar a las víctimas adecuadas para el tipo de progresión que tú estás proponiendo.-

– Yo no lo creo. Ellas no tienen que ser mujeres, -aunque me imagino que él lo prefiere. Recién casados -uno u otro sexo. Entonces se puede decir marido en lugar de esposa, el padre futuro, y así sucesivamente. Este tiene hijos, nietos, hermanos, padres, -tal vez una familia extensa-, a la que elegir. -

Ella se deslizó en el coche. -Le dije a Peabody que trabajara en el escenario de probabilidades de contacto. MacMasters, a continuación, el supervisor del CS, el representante de CA, la PD. A lo mejor los elige por orden de aparición. O tal vez de esta manera. Pero tiene que haber algún tipo de proceso de selección. Un calendario para tomarlos, para investigarlos, para organizar la reunión, desarrollar la relación. Y se superponen. Se puso en contacto con Karlene mientras trabajaba a Deena. Comenzó la segunda ronda antes de terminar la primera. -

– Así que, por criterio, ha empezado la tercera ronda.-

– Sí, y tal vez más allá de eso. Pensé que la PD es la más probable, y estamos en ella, pero ella no tiene a nadie que se ajuste a esta progresión. -Eve negó con la cabeza mientras revisaba los datos. -Ella ha estado divorciada por seis años, sin hijos. Ella tiene una hermana, que se casó hace más de veinticinco años, -eso no es de recién casados. Una sobrina y un sobrino, no están casados. -

– Tú no tienes que estar casada para estar embarazada o tener una relación de la que resulte un embarazo.-

– Buen punto. Podría estar uno de ellos en esa etapa de ser así, -podría ser la hermana de la esposa, – la que hace mucho está casada. Vamos a mantenerlos cubiertos, pero no creo que sea la siguiente-.

– Hablando del siguiente, ¿a dónde voy?-

– ¿Hmm? Columbia. Tengo que encontrar a la empleada. Ella dio una residencia como su dirección, y el lugar de venta donde trabaja. Ella no ha respondido a su enlace y no ha devuelto ninguna de las llamadas de Peabody. Sólo quiero ubicarla. -

– Entonces, ¿por qué no ir al huerto? -

– ¿Al huerto?-

– Y elegir un melocotón.- Ella pudo utilizar un enlace que estuviera a mano para llamar.

Vestida con un traje rojo encendido y con zapatos que enfatizaban su altura -y le hicieron vibrar a Eve los tobillos cuando los vio- Peach Lapkoff esperaba fuera del edificio de la administración. Los ojos afilados adquirieron un tono sensual cuando le tendió las dos manos a Roarke.

– Es maravilloso verte.-

Eve, que estaba allí, arqueó las cejas, cuando se besaron las mejillas. -Y tú-le dijo Roarke. -Te ves genial.-

– Yo voy a llegar al fondo de los bolsillos de algunos ex-alumnos en breve. Es mejor que mirar por fuera. Teniente. -Ella ofreció a Eve su mano. -He encontrado a Fiona. Ella ha estado en un retiro de dos días. No están permitidos los dispositivos de comunicación. Yo la he sacado, ya que parecía lo suficientemente importante como para interrumpir. Ella está aquí. No estaba segura si iba a requerirla en mi oficina, o en algún otro. -

– No es necesario. No debe tomar mucho tiempo. -

– He oído los informes de que hubo otro asesinato. Otra joven violada y asesinada. -

– Podemos confirmar que los casos están conectados.-

– Los medios de comunicación no tiene problemas lanzando especulaciones acerca de un asesino en serie, dirigido a mujeres jóvenes. Tenemos un montón de mujeres jóvenes en el campus. Hay gran preocupación. -

– Yo le aconsejaría a sus estudiantes y al personal tomar precauciones. Pero las afirmaciones de los medios de comunicación o especulaciones no tienen la confirmación de la NYPSD-.

Peach siguió mirando a Eva como si tuviera rayos X en su cerebro. -Yo estaba preocupado cuando pidió que localizara a Fiona Wallace. Que podría tener alguna razón para creer que está en peligro. -

– Por supuesto que no. Se refiere a una venta que hizo el pasado marzo en el Centro Deportivo que puede conectarse a la investigación. -

– Me siento aliviada.- Peach miró sobre la cabeza de Eve. -Aquí viene-.

– ¿Reconoce usted a todos sus alumnos a la vista, Dra. Lapkoff?-

– Peach-, dijo. -No, no lo hago, pero miré su ID cuando pidió que localizara a la señorita Wallace. -

– Dra. Lapkoff. -La chica no tenía más de veinte años, con la piel pálida como la luna y lo que parecían ser varios kilos de pelo rojo apilados en la parte superior de su cabeza. Ella estaba un poco sin aliento, Eve llegó a la conclusión, por el viaje a través del campus y el miedo al ser convocada por el presidente.

– Tú no estás en ningún problema.- Dijo la mujer en un suave tono maternal. Y no serás penalizada por el tiempo que estés fuera del retiro. Ella es la teniente Dallas, del NYPSD. Ella espera que tú la puedas ayudar. -

– ¿Ayudar?-

– Sí. ¿Le gustaría que yo me marchara, teniente? -

– No es necesario. Tú trabajas en el Centro Deportivo-.

– Sí, señora. Soy estudiante durante todo el año, y trabajo allí para ayudar con los gastos. He trabajado allí por más de un año. -

– Estabas trabajando allí el treinta y uno de marzo.-

– Ah. Yo no estoy segura. Tal vez. -

– Le vendiste varios artículos a este hombre.- Eve señaló el boceto. -¿Te acuerdas de él?-

– No estoy segura. Exactamente. Fue hace dos meses, y somos una tienda muy popular. Puede estar muy ocupada. -

– Tengo una lista de lo que compró. Tal vez te ayude a recordar. -Eve comenzó con la lista, vio parpadear a Fiona, cuando llegó a los zapatos. -¿Te acuerdas?-

– Lo hago. Fue una venta muy grande, y los zapatos son muy caros. Me acuerdo porque le dije que salían a la venta, por un día, en sólo una semana más. Diez por ciento, y eso es mucho cuando se van por tres facturas y media, ¿sabe? Pero él lo quería en ese momento. Parecía un poco diferente de esta imagen. Es por eso que no lo reconocí de inmediato. -

– ¿Cómo es eso?-

– Tenía el pelo mucho más largo y ondulado. Tenía un pelo mag. Era muy lindo. Supongo que coqueteé con él un poco, como se hace, le pregunté si vivía en el campus, y que estudiaba. Creo que dijo que estaba viviendo fuera del campus. Él era bueno, pero no ligó de nuevo, así que pensé que estaba viendo a alguien o yo no le llamaba la atención. Hice una broma acerca de que le había tocado la lotería o algo así porque iba a comprar tanto. Recuerdo que sonrió, y dije, -wow, una sonrisa asesina. Y él dijo -pensé que era gracioso- que el hábito hace al monje. Parecía una cosa extraña de decir cuando estás comprando camisetas y ese tipo de cosas. Yo lo embolsé todo, y se fue. -

– ¿Lo volviste a ver?-

– No, yo no lo creo.-

– Bueno Fiona. Gracias. -

– ¿Ha hecho algo ilegal?-

– Estamos interesados en hablar con él. Si lo ves, hazme un favor. No te acerques a él, y ponte contacto con nosotros. -Eve le dio una tarjeta.

– Claro. ¿Debo volver al retiro ahora? -

– Sí,- le dijo Peach. -regresa-.

– Sí, señora. -

– ¿Eso ayuda?- Peach preguntó cuando Fiona salió a toda prisa.

– Esto confirma algo de información, continúa estableciendo el patrón, y me dice que está satisfecho con algunas victorias. En ocasiones es petulante. Sí, eso es útil. Como tú lo has sido. Gracias. -

– Estoy feliz de poder ayudar, y espero en los informes de los medios de comunicación, que muy pronto, se halla detenido a este hombre.-

– Yo también-

Cuando llegaron al coche, Roarke preguntó: -¿Y ahora qué?-

– Tengo que volver sobre la lista de nombres y datos de los relacionados con la detención de Irene Schultz. Tengo que hablar con ellos, todos ellos, y tratar de averiguar su próximo objetivo. -

– No todos viven en Nueva York-.

– No- Ella subió al coche. -Pero tiene, al parecer, una fuente sin fin de identificaciones, y créditos para ir con ellos. Tal vez su próximo objetivo esté en Nueva York, tal vez no. Necesito entrevistar a todas las conexiones a los posibles objetivos para tratar de solucionarlo. -

– No todas las conexiones viven en Nueva York, tampoco, o en la ciudad. Podrías, por supuesto, tomar un servicio de transporte desde y hacia, o llevar a cabo las entrevistas a través del -enlace-.

– Prefiero un cara a cara, pero no es práctico, así que la mayoría tendrá que ser por enlace. El problema es que la gente se expande. Se casan y / o tienen hijos. Los niños hacen lo mismo. O tienen hermanos que lo hacen. Entre veinte y tantos años, tienes una horda en espiral de una sola persona. -

– La gente y su propensión a la progenie.- Divertido con ella, Roarke negó con la cabeza. -¿Qué puede hacerse?-

– Lo que me gustaría hacer es traer a todos a la Central, tomarlos de uno a la vez, y si es necesario, a todos juntos, para ver si las respuestas de una persona se destacan en algo más que de otra.-

– Yo puedo arreglar eso.-

Ella le dio una mirada suave, mientras él los llevaba a casa. -¿Qué? ¿Tú transportarás a todo el mundo a la central, -desde donde quiera que estén? No sólo es poco práctico, muchos de ellos no van a querer. Otro problema con la gente es que tienen vidas, y puede ponerse irritables cuando se les pide que ayuden en una investigación policial en la que pueden o no estar implicados. -

– Los transportaré-, dijo, -los transportaré.-

– Bueno, claro, tus transportes son suaves y brillantes, pero…

– Eva, aunque a menudo tengo que viajar por negocios, o traer a alguien, ¿con que frecuencia debo hacer negocios por todo el mundo, incluso fuera del planeta, sin salir de Nueva York?-

– Sí, pero tienes que… -Ella tuvo un recuerdo repentino de entrar en su oficina sin previo aviso mientras él llevaba a cabo una reunión. Una reunión holográfica. -Podría funcionar-, consideró ella. -Nosotros no usamos holo para las entrevistas en general, porque si estás tratando con un sospechoso, incluso con testigos en algunos casos, la defensa tratará de conseguir cualquier cosa del método de recogida mixta. Es complicado, ya que puede ser manipulado. Lo quieres sólido, necesitas una confesión o la evidencia cara a cara, en el expediente. Pero esto… -

– No estamos buscando una confesión, no entrevistamos a sospechosos, o incluso personas de interés-.

– Sí, podría funcionar. Voy a querer a cargo a un APP, asegurarme de que no hay ángulo de procedimiento que tenga que cubrir. Si alguna información me lleva a un arresto, no queremos a algún abogado hábil tratando de reclamar que la información estaba contaminada, y por lo tanto, bla, bla. Pero creo que podemos hacerlo. -

– Has utilizado el holo con Ricker-.

– Sí, y ya está haciendo su vida sin posibilidad de libertad condicional. Pueden tratar de bailar en torno al método por acusarlo de conspiración contra Coltraine. ¿Pero ordenar el asesinato de un policía, desde el interior de una colonia penal fuera del planeta donde la holo-visitas y consultas legales se permiten? Va a ser difícil para cualquier persona discutir el método, y lo aclaré en primer lugar. Cleo no formaba parte del holograma, y se le permitió verlo. No usé ninguna prueba, en sí misma, desde el holograma para elaborar su confesión, y yo, de nuevo, lo aclaré en primer lugar. El juez ya rechazó la petición de su abogado-.

– Me alegro de oírlo.-

– Creo que podemos usar esto, si las partes están de acuerdo. Me ahorra horas de tiempo, y si tienen una segunda sería cara a cara. Sólo necesito asegurarme de que nuestro culo está cubierto. -

– Nuestros culos están cubiertos, y ya lo he preparado.-

– ¿Cuánto tiempo para organizarlo?

– El programa básico, veinte minutos como máximo. Luego voy a necesitar las coordenadas de los que quieres traer. Tomará unos minutos triangular cada holo-.

– Lo vuelvo a repetir. Es muy útil tenerte alrededor. -Sacó su enlace y contactó con la APA Cher Reo.

Hubo, como era de esperar, algunas cuestiones legales. Pero incluso con ellas, iba a ahorrar un tiempo considerable. Siguió consultando con Reo mientras caminaba a la casa, y pensaba que una de las ventajas de la basura legal era la oportunidad de ignorar totalmente a Summerset.

Una vez que obtuvo el visto bueno, comenzó a hacer los contactos y arreglos. Había llegado a medio camino cuando Roarke llamó. -El programa será en la holo-habitación. Necesito esas coordenadas-.

– Voy a traértelas. Peabody puede hacer que lleguen el resto de los contactos. Cinco minutos-.

Ella dejó a su pareja con los demás, a continuación, reunió lo que necesitaba. Utilizó el ascensor, y salió en una versión más grande y más elegante -de alguna manera- de su oficina en la casa.

– Mmm-.

– Las apariencias pueden contar. Uno de estos días, es posible considerar la sustitución de esa mesa tuya con una estación de trabajo como esta. -

Ella frunció el ceño ante la superficie oscura y brillante de la consola en forma de -U-, su base de D y C y el panel de control elegante.

– Me gusta mi escritorio.-

– Sí, lo sé.- Él la besó suavemente, y luego señaló una mesa en la parte trasera de la sala. -Tienes un sándwich.-

– ¿Tenemos bocadillos?-

– Come. Puedes traerlos al escritorio, si lo deseas. Conociéndote, supongo que estarás de pie la mayor parte del tiempo. El sujeto de la entrevista se puede colocar en cualquier silla o sofá. La unidad de aquí, y la pantalla de pared están en pleno funcionamiento en caso de que los necesites. -

Pulido, pensó. Muy pulido. -Tiene que ser registrada.-

– Lo será-.

Como le señaló la mesa, cogió un sándwich. -Vamos a traer a Peabody en primer lugar.-

Él asintió con la cabeza, usó su propio enlace.

– Peabody.- La cara de Peabody en toda su gloria apareció a la vista de Roarke. -Oh, eh. Hola! -

– Hola. A la teniente le gustaría que te unieras a nosotros. -

– Está bien. Wow. Nunca he estado en un holo antes. -

– Voy a ser suave-, dijo y le hizo reír. -Allí. Te tengo. Iniciando-.

Pequeños puntos de luz se arremolinaron, a continuación, el remolino se convirtió en Peabody.

– Oh. Caramba. Eso fue fácil. No se sintió extraño. -Miró a su alrededor, parpadeando. -Es raro, pero no se sintió extraño. ¿Qué es eso? -

– ¿Qué? Es un sándwich. -

– Oh, es un panini. Realmente tiene buena pinta. -

– Hay más allá. Sírvete tú misma. -

– Gracias.- Peabody volvió a la mesa, extendió la mano, y su mano pasó directamente a través del sándwich y la bandeja. -Eso es lo malo. No puedo servirme porque no estoy realmente aquí. Pero estoy aquí. No entiendo la holo-ciencia. Cada vez que McNab trata de explicármelo, mi cerebro se va a dormir. -

– Vamos a dejar a los informáticos y a ser policías. Termina los contactos, consigue los permisos. Voy a conectar con el PD de nuevo, luego vamos a traerla.-

Era extraño, admitió Eve, pero también era rápido y eficiente. En momentos, ella tuvo al ex defensor público sentada en su despacho programado.

– Agradezco el tiempo, Sra. Drobski-.

– No es ningún problema. Me gustaría tener este asunto resuelto tan pronto como sea posible. Es desconcertante. -

– Estoy segura de que lo es. Su seguridad y la seguridad de su familia es una prioridad-.

– ¿Hay pruebas viables de que yo -o mi familia- somos objeto de acoso? ¿Evidencia sustancial que vincule este peligro a un acusado que representé hace más de veinte años? -

– Usted está pensando como un abogado. Yo estoy pensando como un policía. ¿En cuál quiere confiar su vida, y la vida de su familia? -

La mujer cambió, ya sea por incomodidad o molestia. -Estoy aquí, ¿no?-

– A usted le mostraron el dibujo de un artista, del sospechoso. ¿Usted todavía está segura de que nunca ha visto a este hombre antes? En pantalla la imagen de Darrin Pauley. -

Drobski estudió la pantalla. -Yo no, no que yo sepa.-

– Usted tiene un hermano.-

– Sí, Lyle. Como le dije, es consultor financiero. Hablé con él, y le he mostrado el dibujo, al igual que a su esposa y su hijo. Me ha preocupado esto bastante y le mostrado esto a mis padres, que viven en Arizona. Ninguno de ellos reconoce a este hombre. -

– ¿Con quién es más cercana?-

– ¿Lo siento?-

– En su familia. ¿Quiénes son más cercanos a usted? -

– Eso es muy difícil… mi padre, supongo. Es la razón por la que me convertí en abogado. Yo puedo asegurarle, teniente, que no es lo bastante ingenuo o crédulo como para ponerse o poner a mi madre en peligro. Y apunta a las mujeres, ¿no? -

– No se descarta un cambio de destino masculino. ¿Quién más está? -

– No tengo ninguna otra familia.-

– ¿Con quién más es cercana? La familia no siempre es de sangre. -

– Oh. Dios. -Por primera vez, Drobski parecía conmovida. -Lincoln, Lincoln Matters. Hemos estado involucrados desde hace más de un año, y mi socia, Elysse Wagman. Somos muy cercanos, lo hemos sido desde la universidad. Ella… ella es como una hermana-.

– Peabody-.

– En eso.-

– ¿Crees que podría ir después con Lincoln o Elysse? Tengo que decirles…

– Estamos ocupándonos de eso ahora mismo. ¿Elysse está casada, cohabita? -

– No. De hecho, ella acaba de salir de un divorcio difícil. Ella tiene una hija, mi ahijada, Renny. Ella sólo tiene once años. -

– Nosotros nos encargaremos de ellos.- Vio a Peabody darle el visto bueno por el rabillo del ojo. -Los policías están en camino a su residencia en este momento, y de Lincoln. Cuando hayamos terminado, me pondré en contacto con los dos, y le explicaré todo. -

– ¿De verdad cree que podrían ser…?-

– Yo no voy a correr ningún riesgo. Quiero que me diga todo lo que recuerde sobre el caso de Irene Schultz. -

– Lo recuerdo muy bien. No había sido un EP mucho tiempo, y yo todavía era idealista. Verde. Sentí, que ya que ella no tenía ningún antecedente, que tenía un niño pequeño, yo podría hacer un buen negocio para ella. Yo pensé en conseguir que le quitaran la carga de ilegales, la solicitud, tal vez conseguir hasta un año, y la rehabilitación obligatoria. Tal vez obtener la mitad del año. Entonces, incluso antes de que yo hablara con ella, tuve el tufillo de que era su marido, y tal vez podría conseguir su derecho a la mitad y rehabilitación, sin tiempo en la jaula si se volcaba hacia él. -

– Pero no lo hizo.-

– No. Ella insistió, incluso a mí, que no tenía parte en lo que había hecho, que no tenía conocimiento de ello. Le expliqué, traté de empujar algo, pero ella no se movió. Probé lo de la madre. Tenía muchas ganas de ayudarla. No iba a poder cuidar de su pequeño hijo si estaba en la cárcel. Pero, ella se apegó. Peor aún, cuando la APA vino a la mañana siguiente para verla, ella insistió en la primera ronda. Podría haber tratado hasta un año, pero ella no me dejó. Me sentí como un fracaso-.

– ¿Habló con el marido?-

– Sí. Estaba enojado. Indignado cuando le dije que había tomado dieciocho meses. Él dijo que no debía hacer más de un año adentro. Estaba de acuerdo con él, pero él me culpó. Cuando le dije que ella no me dejó tratar, se tranquilizó un poco, incluso se disculpó. Cuando fuimos a la corte, trajo al bebé. Un bebé muy bonito-.

Su mirada volvió a la pantalla de la pared. -Dios. Yo lo tuve. Sostuve al bebé, mientras que Irene y su marido tenían un minuto. De hecho, lo tenía. Me sentí mal cuando lloró por su madre. Enferma de que no había podido hacer más. Usted consigue superarlo después de un tiempo, después de ser enterrada bajo el trabajo, el sistema. Ahí es cuando usted tiene que salir, cuando llega a estar enferma por no poder hacer más. -

Cuando Eve sintió que había conseguido todo lo que pudo, trajo a Elysse Wagman, manteniendo a Drobski en su lugar ya que ambos lo habían solicitado.

La mujer absorbió la información que Eve le dio, lo tomó toda, sin flaquear. -Voy a enviar a mi hija a Colorado, con mi madre. Esta noche. -

– Lissy, tienes que irte también. Tienes que…

– Sra. Wagman.- Eve interrumpió las preocupaciones de Drobski. -Entiendo su preocupación por la seguridad de su hija. Los agentes le ayudarán en todo lo que puedan con los arreglos para su transporte a la casa de su madre. Puedo ordenarle, pero se lo voy a preguntar. Si ha sido marcada, cualquier cambio en la rutina le puede avisar. Podemos y la protegeremos. -

– ¿Por cuánto tiempo?-

– Mientras sea necesario. ¿Podría echar otro vistazo a la imagen en la pantalla? Una mirada más cercana. -

– No estoy segura, de cualquier manera.-

– Él puede tener el pelo más largo o más corto. Podía mirar un poco más. -

– El cabello más largo,- murmuró. -Podría ser… Jesús, podría ser. El pelo más largo y barba. Dom Patrelli-.

Bingo, pensó Eve. Incluso cuando se volvió a ordenar Peabody para ejecutarlo, su compañera ya trabajaba en la PPC. -¿Cómo lo sabe?-

– Yo hago el trabajo pro bono en una clínica de ayuda legal, Lower East Side. Hace unas tres semanas, cuando salía él se me acercó corriendo. Sin aliento. Preguntó si yo era Elysse Wagman. Dijo que era periodista, y estaba haciendo una nota de especificaciones sobre la mujer en el derecho, con énfasis en casos de violencia doméstica. Es mi especialidad. Dijo que había corrido detrás, había intentado llegar antes de que la clínica cerrara, me preguntó si podía caminar conmigo, hacerme algunas preguntas. No vi ningún daño. Era encantador y serio, y tan interesado en el trabajo que estamos haciendo. -

– Él le dio su nombre, sus credenciales.-

– Sí. Supongo que fue algo rápido, un poco torpe. Pero estábamos justo en la calle. Él solo caminó conmigo unas pocas cuadras, hizo la clase correcta de preguntas. Había hecho buen estudio de la clínica. Me impresionó, y complació. Podemos utilizar alguna exposición positiva. Me compró una taza de café de un carro glide, y me preguntó si podía ponerse en contacto conmigo si tenía algún seguimiento-.

– ¿Y lo hizo?-

– La semana siguiente, me estaba esperando fuera de la clínica, cuando cerré, con café. Tenía algo de tiempo, así que caminamos hacia el parque, nos sentamos en un banco, tomamos café, mientras hacía su seguimiento. Era… era un pequeño coqueteo, nada importante u ofensivo. Me sentí halagada. Era veinte años más joven, simpático, y yo… yo soy una idiota. -

– No. Es muy bueno en lo que hace. -

– Hablamos, eso es todo, y salió que él es un fan de las películas de Zapoto-.

– Jesús-, murmuró Drobski.

– Ya lo sé. Soy un fan rabioso, y nos metimos en eso, a debatir, diseccionar. Hubo un mini-festival en Tribeca ese fin de semana. -

– Se fue con él.-

Elysse humedeció los labios, empujó su pelo.

Nerviosa, pensó Eve, y avergonzada por partes iguales.

– Lo encontré allí la noche del sábado. Tomamos una copa después, una pequeña cena. Dios, yo realmente le dije que no podía llevarlo a mi casa por mi hija, que era una manera obvia de decir vamos a la tuya. Y dijo que la madre de su compañero de cuarto se encontraba de visita y lo entorpecía. Entonces él me besó y pidió en un taxi. Él me dio un beso -repitió ella, apretándose la mano a los labios.

– Salimos de nuevo a almorzar la próxima semana -solo perros de soja-abajo en el muelle. Él me hizo sentir joven, sexy -y con ganas-, confesó,- porque dijo que quería que yo tuviera un poco más de tiempo. Yo le había dicho sobre el divorcio, y mi hija. Le hablé de mi chica. Él quería que yo tuviera más tiempo, porque quería que yo estuviera segura. -

– ¿Cuándo lo volverá a ver?-

– Una semana a partir del viernes. Él está trabajando este fin de semana. -

No si puedo evitarlo, pensó Eve.