39131.fb2 Mi madre - читать онлайн бесплатно полную версию книги . Страница 4

Mi madre - читать онлайн бесплатно полную версию книги . Страница 4

2

Era la época en que había extranjeros en la ciudad, aunque aún no estábamos en guerra. Creo que se fijaron en mí en el hamam, allí es donde las madres suelen elegir esposa para sus hijos. Lo recuerdo como si fuera hoy, una señora mayor se acercó a mi madre y le pidió: «Un poco de ghasul, el mío se me ha acabado, pero entre la gente de bien nos podemos hacer favores, ¿verdad, Lal-la Hadcha?». Mi madre, que aún no había hecho la peregrinación y no podía aspirar a ese título, le respondió: «Dios aún no me ha trazado el camino de La Meca, lo aguardo con esperanza, toma este ghasul, lo he comprado en la tienda del jerife Wazzani, huele bien y es bueno para la piel». Yo oía esa conversación sin sospechar que era mi pedida de mano. En cierto momento, la señora murmuró algo al oído a mi madre del estilo «que Dios te guarde a esa gacela de piel blanca y de larga melena». Es lo que se dice cuando se hace una propuesta de alianza: que Dios la proteja y la aleje de los ojos de la mala gente.

Unos días después, mi madre me dijo en tono resignado y sin mucho entusiasmo: «Creo, hija mía, que te vas a casar. Tu padre está conforme, pues conoce a la familia del muchacho, yo vi a su madre, son gente noble, descendientes de jerifes, del mismo linaje que nuestro Profeta bien amado, el chico trabaja con su padre, un comerciante que tiene una tienda en el barrio del Diwán, al lado de tu tío Sidi Abdeslam, en realidad, fue él quien pensó en ti al ver lo bien que trabajaba el muchacho. La madre parece buena persona, es de una gran familia, hemos descubierto que nuestros parientes se conocen, son auténtica gente de Fez, como nosotros, y ya sabes, hija, una fassí sólo puede ser feliz con un fassí de su categoría, nosotros no nos mezclamos, así lo entendieron nuestros antepasados y por ello se casaban entre ellos, jamás daré mi hija a un hombre de una familia desconocida, a alguien de esas ciudades extranjeras como Casablanca o incluso Mequinez. El fassí es para la fassía, es una garantía y una medida prudente que no hay que olvidar».

Yo la escuchaba sin decir palabra. Estaba intrigada y tenía miedo: «¡Pero, yemma, si apenas tengo quince años…!».

«Hija mía, ¿acaso no sabes que la última esposa de nuestro Profeta bien amado, su preferida, Aixa, sólo tenía doce años cuando se casó con él? Tú eres hija de un hombre reverenciado y respetado como a un santo. Eres la hija de un jerife, de un descendiente del linaje del Profeta. A mí también me entregaron a tu padre cuando sólo tenía dieciséis años».

– ¿Qué edad tiene ese chico de buena familia?

– ¿Te has vuelto loca? ¡Qué atrevimiento! Tu tío, Sidi Abdeslam, ha hablado tan bien de él a tu padre que no vamos a dudar de sus palabras. Sólo sé que es un hombre con muchas cualidades, de una familia excelente y muy conocida, y que trabaja con su padre en el Diwán. Y eso es todo, ya tendrás más detalles la noche de tu boda, como me pasó a mí, porque ¿acaso crees que vi a tu padre antes de mi boda? Nos descubrimos mutuamente, y he sido la mujer más feliz del mundo.

– ¡Entonces debe de ser joven!

– Absolutamente. Es la primera vez que se casa, no es uno de esos ancianos que buscan una segunda o tercera esposa…

– Yemma, yo nunca te llevaré la contraria, haré lo que me digas con tal de que me des tu bendición.

– No debes temer nada, sólo quiero lo mejor para ti. ¿Sabes, hija? Se me encoge el corazón, cada casamiento es una apuesta, nunca sabemos qué va a pasar, por eso uno se informa sobre la familia; los orígenes son muy importantes, nos permiten saber la educación que se ha recibido, lo malo es si hay engaño, ocurrió una vez con mi primo, Sidi Larbi, le colaron a la hermana mayor de la chica que su madre había pedido en matrimonio, cómo lo iba a saber él, lo descubrió en la noche de bodas, y nosotros, también, pero por tradición en nuestra familia no se acepta el divorcio, así que no tuvo más remedio que aceptarla, es una buena persona, aunque no es guapa, tiene buen carácter. En tu caso no habrá ningún peligro, Sidi Drissi es un joven con muchas cualidades, conocemos bien a toda su familia.